Visita a Holy Land Experience

Holy Land Experience es un parque temática cristiano bautista, que según parece es una especie de "secta" del cristianismo que está muy extendida en Florida y el sur de Estados Unidos.



Holy Land es un parque que no tiene atracciones sino que a base de cartón piedra reproducen Jerusalen de la época, Moiséis separando el mar en dos o la última cena.

Digamos que es un parque educativo pero en realidad da mucho miedo.
Fuimos de visita pensando que habría otros visitantes "curiosos" como nosotros pero todo el mundo se lo tomaba muy en serio.

Ya sólo llegar al parking vimos que las matrículas de los coches eran de estados de estos "intensos" como Arkansas, Texas y sitios así que salen en las películas de los sábados por la tarde.
El parque es bastante espectacular y muy kitsch. Ya en el parking tienes todos los animales de la arca de Noé en cartón piedra y música de ambiente. También hay un pesebre autómata bastante cutre y suenan relatos de la biblia.

Los trabajadores van vestidos de personajes de la época de Jesús y saludan diciendo Shalom. Cosa bien rara porque en la época Jesús no se hablaba hebreo pero estos de holy land tienen un cacao impresionante.
En todas sus tiendas de regalos hay una mezcla de cosas cristianas y cosas judías. No se aclaran.


Hay una cueva de cartón piedra donde cada 15 min reproducen la última cena. Hay 3 jesucristos sexys con los que te puedes hacer fotos (en plan Mickey Mouse) y se turnan para representar a Jesús en la última cena o en el gran teatro del parque donde explican la Biblia en plan musical de Las Vegas con mucho brilla brilla y micros de Madonna.

El teatro es épico, ni la gala de eurovisión tiene tantas luces y efectos...

  La última cena representada cada 15 minutos.
También hay una zona infantil con moiséis y una ballena (esa parte no la estudié en los jesuitas) y da mucho miedo.




 

La zona infantil ¡niños luchad contra satanás!

En la entrada reproducen un mercado Jerusalén de la época de Jesús con música super hortera. El público del parque mayoritariamente son señoras negras de 150 kilos y cowboys jubilados.



Todo está muy limpio y arreglado, demasiado incluso. Venden patas de pavo rustidas para que te las zampes a mordiscos mientras paseas por el jardín de las pregarias, bellamente decorado con bancos en forma de pavo real y pozos de los deseos.


Una de las cosas que más me impresionó, a parte de la última cena fue que tienen un muro de las lamentaciones falso donde la gente introduce pregarias y una vez a la semana envían todas los papelitos a Jerusalén donde alguien allí se encarga de ponerlos en el muro de verdad.

Toni decidió que para acabar la excursión y como "performance" artística se bautizaría a las 19h (es una actividad gratuita anunciada en el programa de mano del parque).

En una piscinita a la salida del teatro se reunió la gente y a los "candidatos" les dieron una túnica (de hecho creo que eran dos para que no se transparentara el underwear... fíjate tu que están en todo...) y después de comerles la olla un rato en privado uno a uno fueron hasta la piscina y Jesus sexy number 2 empezó a decir AMEN a la masa (aunque nosotros pensabamos que decía HEY MEN en plan hip hop y lo flipamos)  y todos se volvieron locos y sumerjieron a Toni en la piscinita y quedó bautizado. Incluso le dieron un diploma escrito en boli con el que queda constancia que ahora es BAUTISTA! (chan chan chan...)

Después de este bonito día de risa y miedo en Holy Land nos fuimos al motel a descansar.


Ya han pasado 8 meses desde que fuimos allí, hoy cuando publico esto es 25 de diciembre y pienso que ahora Holy Land debe estar ON FIRE de musicales y gente chillando aleluya! AMÉN! HEY MEN!

¡Viva el minimal!